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Al igual que una interfaz de usuario permite la comunicación entre los humanos y las máquinas, una API permite la comunicación entre diferentes aplicaciones de software. Las interfaces de programación de aplicaciones permiten transferir los datos de forma ordenada. De esta forma se pueden transferir datos incluso con aplicaciones escritas en diferentes lenguajes de programación.
¿Qué es una API?
API son las siglas en inglés de Application Programming Interface, que se puede traducir como interfaz de programación de aplicaciones. Como su nombre implica, una API permite a programadores externos acceder a determinadas funciones. Las interfaces actúan como punto de acceso para otros programas. A través de una API, los dos programas pueden comunicarse entre sí, intercambiar datos y transferir comandos.
Esto funciona tanto para el software de escritorio como para las aplicaciones móviles o las aplicaciones web. También se puede estructurar un solo programa de tal manera que los diferentes módulos se comuniquen entre sí a través de interfaces. Definición: API
Una Application Programming Interface es una interfaz que comunica diferentes programas entre sí para estandarizar la transferencia de datos y el intercambio de instrucciones entre las partes de los programas.
¿Para qué se utilizan las API?
Hoy en día, varios proveedores de software ponen API a disposición del público para facilitar a los programadores el acceso a los componentes de software. SAP, Amazon y Google, por ejemplo, ofrecen API para varias aplicaciones diferentes. Los desarrolladores pueden utilizar estas interfaces para realizar diferentes tareas:
- Enviar una instrucción del programador a un software y recibir su respuesta
- Insertar contenido en servicios web
- Reutilizar códigos de aplicaciones gracias a la conexión en red de los programas
- Controlar el acceso de otros programadores
En el uso diario, las interfaces de aplicaciones se utilizan, por ejemplo, para servicios web. Por ejemplo, al reservar un vuelo, se puede ordenar al motor de búsqueda correspondiente encontrar todos los vuelos y tarifas a un destino y fecha específicos. Al hacer clic en “Buscar”, el sitio web se comunica con las API de cada una de las aerolíneas para consultar los precios de los vuelos hasta el destino deseado. Todo esto tiene lugar en segundos, y así el cliente tiene rápidamente una visión general de los vuelos ajustados a su búsqueda.
¿Cómo funcionan las API?
Aunque benefician al usuario final, las API son principalmente utilizadas para los programadores. En general, los desarrolladores de una aplicación de software ponen a disposición la interfaz de programación de aplicaciones para que los programadores de otras aplicaciones puedan utilizar la interfaz.
La Interfaz de Programación de Aplicaciones define cómo se recibe y devuelve la información y los datos entre los módulos. Google, por ejemplo, ofrece una API para permitir a otros programadores integrar sus propias aplicaciones en los servicios de Google. Para esto, utilizan un estándar propio al que debe adherirse el software externo.
Para la comunicación entre aplicaciones, en particular en la web, el protocolo REST es muy popular. Una API REST utiliza comandos que también se utilizan para HTTP. Las instrucciones no son complicadas y, por lo tanto, hacen que el intercambio de información sea muy fácil. Además, este sencillo protocolo facilita a los programadores la conexión a la API.
Otro aspecto importante para poder presentar la interfaz de programación de aplicaciones es la estandarización, independientemente del protocolo utilizado para el intercambio. Además, se debe instruir a los otros programadores sobre cómo utilizar la interfaz correctamente. Por esto, las API suelen venir acompañadas de documentación detallada sobre la sintaxis y la función.
¿Qué tipos de API existen?
Existen cuatro clases diferentes de interfaces de programación de aplicaciones:
- API orientadas a funciones
- API orientadas a archivos
- API orientadas a protocolos
- API orientadas a objetos
La elección de la clase depende del área de aplicación. Las interfaces de programación de aplicaciones orientadas a funciones son interfaces relativamente complejas. Por ejemplo, permiten a los desarrolladores acceder a los componentes de hardware.
Solo activan funciones. Las API orientadas a archivos permiten la conexión a nivel de archivos. Por lo tanto, permiten consultar y escribir datos. La interfaz orientada a protocolos se utiliza para la comunicación estandarizada entre programas, y es independiente de los sistemas operativos o del hardware. Las API orientadas a objetos pueden utilizarse de manera flexible.
Al clasificar las API, las interfaces internas también pueden distinguirse de las públicas. Las interfaces privadas o internas solo están disponibles dentro de una empresa. Se utilizan a menudo para conectar las funcionalidades de una empresa, para que los empleados o clientes puedan acceder a ellas a través de redes privadas.
Las interfaces públicas están disponibles para todo el mundo y pueden ser usadas cómodamente por los desarrolladores de software. Google, Amazon, eBay, Facebook, Twitter y PayPal son buenos ejemplos de API públicas. Muchos fabricantes (por ejemplo, Google) también animan activamente a los desarrolladores a participar en el desarrollo de sus API.
¿Qué ventajas ofrecen las API?
Las API tienen ciertas ventajas para distintos grupos: los usuarios disfrutan de las interfaces de programación de aplicaciones, así como los desarrolladores internos o externos.
Los desarrolladores que equipan a sus programas con buenas interfaces de programación gozan de una mayor difusión. Puesto que facilita la interacción de otros programadores con el software, se prefieren las aplicaciones con buenas API.
Los desarrolladores externos pueden ampliar las funcionalidades de su propio software mediante la conexión con otras aplicaciones. En última instancia, los usuarios son los más beneficiados de la conexión con una interfaz. Les permite combinar fácilmente una amplia variedad de programas entre sí y así disfrutar de más comodidad.
Ejemplo: API y SDK para Google Maps
Google Maps es un ejemplo muy conocido de integración de API. Los famosos mapas de navegación en línea se introdujeron en febrero de 2005 y, desde entonces, muchos usuarios finales ya no pueden imaginar la vida sin ellos, ya sea desde los ordenadores o como una aplicación en los smartphones.
En la plataforma de Google Maps, los desarrolladores pueden acceder a SDK y a API que se pueden integrar en sus propias apps, programas y sitios web. Esto les permite integrar rápida y fácilmente la funcionalidad de Google Maps en otras aplicaciones. Por ejemplo, la API de JavaScript de Maps permite a los propietarios de las páginas web añadir mapas interactivos con facilidad. Esto es particularmente útil para las tiendas o restaurantes, cuyo éxito comercial depende a menudo de que los clientes encuentren y visiten sus locales.
¿Cómo se pueden probar las API?
A la hora de integrar las interfaces de programación de aplicaciones en programas o aplicaciones, se deben probar primero para verificar que todo funciona como se espera y que las API no tardan demasiado en acceder a la información. Los desarrolladores que programan sus propias API también deben probarlas primero. Por suerte, hoy en día probar las API es relativamente sencillo, sobre todo gracias a aplicaciones como Postman o CURL.
Te esperamos en los siguientes artículos en donde hablaremos mas acerca de estos temas, los cuales hoy en día son de vital importancia en el mundo de la tecnología.
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